ESQUÍ DE MONTAÑA:
CERRILLO REDONDO Y CERRO EL CABALLO DESDE EL BARRANCO.
17 DE ABRIL DE 2025.
Salimos con los esquís puestos desde el coche, pues había
nieve en el carril todo el rato hasta el barranco del Caballo. Esta nieve había
desaparecido a la vuelta a causa del calor.
El grupo de hoy es grande: Fer, Luis, Camy, Maribel,
Pascual, Salva, Íñigo y yo.
En el barranco tomamos paralelos al cauce y ganamos altura
con rapidez a través de una nieve bastante dura.
A 2500 m pasamos por la gran piedra que suele ser el límite de la nieve cuando la primavera está bien avanzada.
Seguimos subiendo y la nieve se va endureciendo más y más, en parte por el intenso viento de norte que nos azota, hasta tal punto que cerca del collado del caballo hace que parte del grupo opte por las cuchillas y parte por los crampones.
Al saltar al otro lado del collado las condiciones cambian diametralmente, pues al estar a sotavento y con una temperatura no muy baja permite que la nieve esté transformada en primavera, lo que nos concede una esquiada de las buenas hasta el fondo del río Lanjarón, a 2600 m.
Fer, al otro lado del collado, al fondo se ve Cerrillo Redondo. |
Ojo, porque hay cornisa en el collado.
Ponemos pieles y nos vamos a superar los 400 m de desnivel que nos separan de Cerrillo Redondo. A medida que ganamos altura la nieve se va endureciendo y el viento arreciando. Hasta tal punto que en la divisoria la nieve está como un cristal y el viento te desarregla la permanente.
Río Lanjarón. |
En el collado que hay al oeste de Cerrillo Redondo quitamos pieles y comenzamos a descender, pero cuando llevo unos llevo descendidos unos 50 metros escucho las voces de Fer, que me dice que el grupo ha decidido retirarse. Así que pieles y para arriba otra vez.
Dato importante: mirando hacia Las Alegas se ve que se ha
ido casi toda la nieve.
Al llegar a la divisoria hacemos un cambio rápido y tiramos
de nuevo hacia el río Lanjarón. Al principio tenemos nieve muy dura, que se va
transformando según bajamos en deliciosa “cremita nevadensis”.
En el río echamos un buen rato de charla antes de comenzar a
subir.
La ascensión la hicimos trazando una amplia diagonal yendo pegados a los tajos.
Cuando llegamos al collado, encaminamos nuestros pasos hacia El Caballo. Otra vez nieve dura y viento.
La esquiada desde la cumbre de El Caballo hasta el coche es una de las míticas de la Sierra, pues hablamos de casi 1000 m de desnivel en cuatro kilómetros, llenos de nieve “primaveraca de la güena”, de esa para dar gritos, como así nos lo reconoció el amigo Íñigo en su primera incursión por estos lares.
En resumen: tres bajadones primaverales de los típicos de
Sierra Nevada, el primero de 300m de desnivel, el segundo de 400m y el último
de casi 1000 m. Ahí la llevas, Catalina.
Y para finalizar, cervecitas de rigor en Nigüelas… como
decía el otro: “no digo que me lo mejores, iguálamelo!”
Espero que os haya gustado.
DATOS PRÁCTICOS:
DISTANCIA: 18 KM
DESNIVEL: 1700 M
TIEMPO: 6H 30 MIN
Buenas actividad. Nosotros queríamos ir esta semana hacer es Rita y acabar en la estación. Pensáis que se podrá hacer???
ResponderEliminar